CÓMO ESTÁ EL ESPACIO AÉREO?
Lo mejor y lo peor de la aviación civil
COMITÉ DE EMPRESA DE VUELO EN IBERIA
Por haber sabido alcanzar la unanimidad
Por primera vez en los más de 30 años de historia del Comité de Empresa de Vuelo de Iberia, los diversos intereses que confluyen en él, representados por las fuerzas sindicales que lo componen, han sido capaces de hallar más puntos de unión que de desacuerdo. Una decisión histórica que la situación actual justifica plenamente, y que bien merece un aplauso. El escenario de opacidad informativa que Iberia está generando entorno a la creación de Iberia Express ha actuado como necesario catalizador de voluntades a la hora de plantear un frente común ante una maniobra empresarial que precisamente por su falta de transparencia y ambigüedad en sus planteamientos, despierta día a día mayores recelos entre los que la vivirán –acaso padecerán- en primera persona. No se puede menoscabar el importante activo que los recursos humanos representan para cualquier empresa sin correr un grave riesgo de que al final todo lo tan meticulosamente planificado se vuelva en contra. La unión hace la fuerza. Sin duda el viejo aforismo sigue siendo plenamente vigente en nuestros días tanto como lo fue en la Grecia clásica de Esopo, aunque otros se empeñen en contraponer el divide y vencerás, o la desinformación, como estrategia para lograr sus propósitos. |
PRESSING A LAS TRIPULACIONES
Por pretender poner en riesgo la seguridad de las operaciones
Las últimas tendencias en algunos sectores empresariales, alentadas o no por la crisis, llevan a disfrazar de mejora en la eficiencia lo que no es más que un burdo intento de obtener más por menos, sin importar la excelencia. Cuando estas prácticas alcanzan al ejercicio de la profesión aeronáutica, además, tienen una alta componente de irresponsabilidad por los riesgos que acarrean. La actitud de determinados operadores que presionan a sus tripulaciones para que excedan el tiempo de vuelo, hasta el punto de que su no acatamiento puede acarrear sanciones e incluso en la pérdida de la condición de Comandante, constituye una práctica cuyas consecuencias a nadie escapa transgreden la legalidad, y más allá, afectan seriamente la seguridad de las operaciones de vuelo. La extrema gravedad del asunto ha propiciado que el Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC) haya tomado, a través de su Comisión Deontológica, cartas en el asunto. Una postura que cabe esperar que sea secundada del modo más inmediato posible por la Autoridad Aeronáutica que es, en definitiva, quien tiene competencia legal para corregir y erradicar estos peligrosos comportamientos. |