El aparato fue entregado en una ceremonia en las instalaciones de Boeing en Carolina del Sur
Boeing y Singapore Airlines celebraron ayer la entrega del primer avión 787-10, el miembro más nuevo, más grande y más eficiente de la familia Dreamliner.
Alrededor de 3.000 personas acudieron a la ceremonia de entrega en las instalaciones de Boeing en North Charleston, Carolina del Sur, donde se fabrica el último modelo 787.
Al igual que los otros 787 Dreamliners, el 787-10 está diseñado con materiales compuestos, los sistemas más avanzados y características de cabina cómodas.
El fuselaje más largo permite transportar unos 40 pasajeros más o un total de 330 asientos en una configuración estándar de dos clases.
Singapore Airlines, a través de su filial Scoot, opera actualmente el 787-8 y el 787-9. Con ésta entrega, el grupo será el primero en operar los tres modelos de Dreamliner.
Singapore Airlines tiene 68 unidades pedidas a Boeing, incluidos 48 787-10 adicionales, y 20 de los nuevos 777-9.