¿CÓMO ESTÁ EL ESPACIO AÉREO?
Lo mejor y lo peor de la aviación civil
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AIRBUS
Por poner manos a la obra con el problema de los drones
El anuncio esta pasada semana del inicio de un proyecto liderado por Airbus, en colaboración con Dedrone, para hallar un medio de evitar la presencia de vehículos voladores dirigidos a distancia -los populares drones– en las proximidades de los aeropuertos resulta posiblemente la mejor noticia de la semana.
Los drones, como toda nueva tecnología, debe encontrar todavía su encaje en el sistema. Cierto es que su auxilio abre un sinfín de nuevas posibilidades, pero también constituyen un peligroso “juguete” en manos inadecuadas. El número de incidentes entre la aviación comercial y estos aparatos en las zonas de aproximación y aterrizaje de aeronaves no ha dejado de crecer ni un solo instante en los últimos años, y por pura lógica matemática es sólo cuestión de esperar para que el incidente se convierta en accidente. Atajar dicha posibilidad antes de que se produzca un fatal desenlace merece todo el encomio. |
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AIR EUROPA
Por haber perdido la prisa en negociar
Air Europa ha dejado para septiembre las negociaciones con los pilotos, tras conseguir “in extremis” que Sepla desconvocara la huelga prevista para finales de julio y principio de agosto. Oficialmente, la compañía no considera este asunto de tanta importancia “como para alterar el periodo vacacional de quienes deben estar al frente de la negociación”.
Resulta curiosa esta “pérdida de interés” en zanjar la negociación. Los asuntos no serán “de importancia”, pero estuvieron a punto de llevar a la compañía al paro justo en plena operación salida. Tal vez los asuntos no serán de importancia, pero el caos en los aeropuertos -convenientemente mitigado por los servicios mínimos- si que lo hubiera sido.
Una vez conseguido el objetivo de conjurar el peligro de huelga, ahora resulta que los temas que estuvieron a punto de propiciarla carecen de calado suficiente. Es más, el trasvase de aeronaves a la filial Express ha continuado. Nos parece una postura harto peligrosa. Cerrar los ojos ante un tren que se aproxima no exime del riesgo de acabar siendo atropellado por él. |