El episodio tuvo lugar ayer, y deja como secuela 9 heridos de diversa gravedad
HONG KONG (EXTRACREW.COM/agencias)- Un Boeing 747-400, perteneciente a la compañía holandesa KLM, que cubria la ruta entre Amsterdam y Hong Kong experimentó una fuerte turbulencia unos 40 minutos antes de aterrizar en Hong Kong.
El avión se encontraba a 8900 metros de altitud (FL291) cuando fue sacudido por una fuerte turbulencia que duró apenas dos segundos. Tiempo suficiente para que diversos pasajeros y TCP fueran arrojados contra el techo y posteriormente contra el suelo del avión.
Una vez finalizado el episodio, y ya iniciada la aproximación, la tripulación requirió por radio los servicios de emergencia en tierra.
Un total de nueve personas (seis pasajeros y 2 tripulantes) sufrieron heridas de diversa consideración. Ocho de ellas tuvieron que ser trasladadas a centros hospitalarios.
Según declararon algunos pasajeros, la turbulencia duró 3-4 segundos, y todo lo que no estaba bien asegurado fue lanzado contra el techo y luego contra el suelo. Los indicadores de abrocharse los cinturones de seguridad no estaban encendidos en el momento del accidente.
La aeronave permaneció en tierra en Hong Kong durante 7 horas y luego partió para el vuelo de regreso con un retraso de 4:20 horas.