Las low-cost sueñan ofrecer a sus pasajeros poder volar sin piloto en la cabina de vuelo. Las aviones van a tope, los billetes de avión siguen siendo muy competitivos y con precios super asequibles. Pero la escasez de pilotos amenaza su negocio.
Las compañías aéreas no paran de comprar aviones. A la gente no le preocupa si hay suficientes pilotos para atender tal demanda o no. Sólo buscan que su trayecto salga lo más barato posible y seguir volando.
Esto ocurre mientras se oyen voces de especialistas que advierten de una inminente escasez de pilotos. La necesidad proyectada parta los próximos 20 años es de 600.000 nuevos pilotos sólo en Estados Unidos ¿Hay realmente escasez de pilotos?
Según datos de la FAA, el número de pilotos comerciales y ATPL en activo, con la licencia de vuelo y el certificado médico en vigor, se ha mantenido constante hasta 2007, entorno a los 260.000 pilotos. Los años posteriores se experimentó un aumento en el número de pilotos, llegando a incrementarse un 10% hasta 2010. Sin embargo el número de pilotos cae en 2011 debido a las jubilaciones y la menor entrada de nuevos pilotos (fuente AOPA: ver)
Ante la previsible carencia de pilotos de cara al futuro, algunas voces se preguntan si los pasajeros aceptarían volar en un avión autónomo, es decir, sin pilotos.
Al eliminar uno o incluso dos pilotos de la cabina, la escasez de pilotos dejaría de ser aun problema. Al mismo tiempo, el desarrollo de tecnologías automatizadas reduce los accidentes e incidentes causados por errores humanos… ¿es más seguro un avión sin pilotos? Hace poco un B737 MAX se estrellaba por culpa de los automatismos (ver artículo)
QUIÉN QUIERE VOLAR EN AVIONES SIN PILOTOS
Entre los defensores del vuelo comercial autónomo están algunas compañías aéreas, pero no todas. Para los que están a favor, especialmente las low-cost, las tecnologías autónomas eliminarían los costos salariales de los pilotos. Sin embargo, conscientes de que muchos pasajeros dejarían de volar en un avión sin pilotos, otras compañías consideran un coste asumible y necesario contar con una tripulación técnica.
También hay defensores entre los fabricantes de aerolíneas, que desean diseñar nuevos aviones sin tener que preocuparse por las configuraciones de la cabina. Este rediseño podría llevar a una mejor aerodinámica, más espacio de cabina para pasajeros y la posibilidad de comercializar asientos premium en el morro del avión.
El colectivo de pilotos se opone a tal medida, lógicamente. Un piloto humano sigue siendo esencial en caso de una emergencia o fallo del piloto automático. El increíble aterrizaje del capitán Sullenberger en el río Hudson se cita comúnmente como prueba de que no estamos listos para un vuelo sin piloto.
QUÉ PIENSAN LOS PASAJEROS
¿Qué opinan los consumidores sobre el vuelo comercial autónomo?
Los estudios de la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle y el Instituto de Tecnología de Florida han demostrado repetidamente que la mayoría del público no está a favor de un vuelo sin pilotos.
Sin embargo, un porcentaje marginal de los encuestados está de acuerdo con la idea si como consecuencia los billetes de avión son más baratos.
Estadísticamente…
– Los hombres están más dispuestos a volar en aviones comerciales autónomos, en comparación con las mujeres.
– Las personas de origen asiático están más dispuestas a volar sin un piloto humano, en comparación con los estadounidenses.
– Los adultos más jóvenes están más dispuestos en comparación con los ancianos.
– Y una mayoría de personas están a favor de permitir vuelos de carga autónomos. ¿Será la carga el primer paso para la automatización total de los vuelos?
CÓMO CONVENCER A LOS PASAJEROS PARA VOLAR SIN PILOTOS
Entonces, ¿qué hace falta para hacer que esta idea “cuaje”? La investigación sobre el transporte terrestre sin conductor nos da pistas de cómo convencer al público.
Lo primero es la educación. Los estudios muestran que cuando los consumidores saben más sobre el sistema de piloto automático, y particularmente si la información es positiva, están más dispuestos a viajar en un vehículo autónomo.
En segundo lugar, es demostrar un registro de seguridad consistente. Si la industria de la aviación operara aviones de carga autónomos durante 5 años, el público aprendería rápidamente que este es un método seguro de viaje, asumiendo, por supuesto, que no hay un accidente grave.
El mayor riesgo al que se enfrenta la industria es un accidente grave debido al piloto automático, o uno en el que el piloto automático no supiera gestionar. Si un avión sin pilotos se estrella, podemos estar seguros de que esto repercutirá a través de los medios de comunicación notablemente en la sociedad y, consecuentemente, retrasará años la aceptación del vuelo autónomo.
Los fabricantes están lejos de disponer de la tecnología para hacer un vuelo seguro 100%. Cuando dispongan de ella, necesitarán tiempo para comprobar que está libre de fallos. Y a partir de entonces se pondrá en marcha las pruebas de vuelo autónomo.
EL FUTURO QUE NOS ESPERA
¿Habrán vuelos comerciales sin pilotos? Creemos que sí. Pero todavía pasarán decenios antes de que se ponga en marcha los primeros vuelos para los más valientes. Y una mayoría de la población seguirá prefiriendo pagar un poco más por volar con piloto.
A fin de cuentas, a los pasajeros les tranquiliza saber que en caso de emergencia el piloto va dentro del avión.