Redacción Extracrew 
19/11/2020 
La FAA ha aprobado definitivamente los cambios introducidos en el B737-MAX. Considera el avión seguro para el vuelo tras las actualizaciones en diseño, software y plan de entrenamiento de pilotos.
El B737-MAX está en tierra desde marzo de 2019, más de año y medio, como consecuencia de dos accidentes con víctimas mortales. En este largo período se ha demostrado, mediante una investigación detallada, que se cometieron graves errores, al menos en tres áreas:
- Errores de diseño por parte de los ingenieros,
- Malta gestión del proyecto por parte de Boeing, y
- Falta de supervisión por parte de la FAA, la autoridad competente.
La crisis ha sido de tal calado que provocó el cambio de la cúpula directiva de Boeing y un relevo en la agencia. El nuevo director de la FAA, Stephen Dickson, ex piloto de Delta, ha asegurado que estará “100% tranquilo” cuando su familia vuele en un B737 MAX, con los cambios introducidos.
El nuevo director de Boeing, David Calhoun, se ha felicitado por el fin de la restricción, aunque dice que nunca olvidará las víctimas de los accidentes. El anterior CEO centró su gestión en el ahorro de costes.
Tras la aprobación por parte de la FAA, se espera una reacción igual por parte de EASA y otras administraciones.
¿Qué cambios se han realizado?
El B737 MAX ha experimentado cambios profundos en diseño, lógica de circuitos y comportamiento del avión, en especial en aquello relacionado con el MCAS.
- Se ha rediseñado el módulo MCAS
- Nuevo sistema de alerta en el cockpit en caso de conflicto de los sensores MCAS
- Se ha modificado el cableado del B737
- Nuevo entrenamiento de pilotos de B737 MAX
- Cambio de manuales, con actualizaciones en sistemas, procedimientos y entrenamiento.
¿Cuánto falta para que el B737-MAX vuele en Europa?
Aún ha de transcurrir tiempo, la autorización no será inmediata. El proceso puede llevar desde semanas hasta varios meses.
Los reguladores mundiales -es decir, las administraciones- deben autorizar los cambios. Se espera una mayor rapidez por parte de EASA en Europa, mientras que la CAAC china puede ser más lenta para autorizar las operaciones de vuelo del avión parado.
En EE.UU. la FAA debe autorizar todavía el plan de entrenamiento de pilotos. El sindicato mayoritario de pilotos ALPA (Air Line Pilots Association), con más de 60.000 afiliados, está revisando el nuevo módulo de entrenamiento y ya ha mostrado su satisfacción.
La FAA ha trabajado conjuntamente con las autoridades de Europa, Canadá y Brasil en la revisión de los entrenamientos de los pilotos.
¿Cuáles han sido las consecuencias de la parada del B737-MAX?
En primer lugar, la reputación del mayor fabricante de aviones del mundo ha quedado muy tocada. La desconfianza de los pasajeros ha provocado una caída de ventas del avión, seguido de la cancelación de pedidos. En torno a 1.000 ventas han sido anuladas por distintas aerolíneas a día de hoy.
Además, el fabricante ha de hacer frente a indemnizaciones millonarias por las víctimas del accidente. Y también ha de indemnizar a las aerolíneas, que han visto cómo sus aviones Boeing han quedado en tierra por los errores de diseño del MCAS.
La crisis sanitaria ha dado un respiro a Boeing, para que se reponga de los errores pasados y pueda afrontar el futuro con una estrategia revisada. El primer paso se ha dado ahora con las garantías de la FAA.
La producción de B737-MAX podrá ponerse nuevamente en marcha en breve. Todavía hay 4.200 ordenes de compra que el fabricante norteamericano debe satisfacer.
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