CINCO claves para que no te despidan de tu aerolínea por culpa de las redes sociales

Con frecuencia se sanciona o despide a tripulantes que han metido la pata en las redes sociales. En este artículo te damos las claves para usar libremente internet y sin consecuencias ¡Te interesa!

En ocasiones no sabemos valorar las enormes consecuencias de lo que un mensaje en la red puede tener para nuestro empleador o los colegas de trabajo. No es un juego, internet puede amplificar exponencialmente un mensaje provocando consecuencias inesperadas o indeseadas. ¡Cuidado!

Todos conocemos los riesgos porque hemos sido sensibilizados por campañas de concienciación en este sentido. Sin embargo nadie está a salvo de provocar accidentalmente una tormenta virtual contra la aerolínea para la que se trabaja… especialmente si afecta a la seguridad de vuelo.

El departamento de Recursos Humanos enfurecerá si cuestionas la seguridad o el prestigio de la compañía aérea en las redes.

Algunos casos recientes

En octubre de 2018 una tripulación de Ryanair simuló dormir en el suelo (ver noticia) y colgó la foto en internet para “denunciar las condiciones de trabajo y descanso de la compañía”. La imagen impactó con tal fuerza las redes sociales que los principales medios de comunicación publicaron la noticia, ilustrándola con la foto falseada. El daño contra Ryanair fue enorme, y los trabajadores fueron despedidos al comprobarse el engaño.

Un comandante de easyJet publicó en su muro un breve vídeo de realidad aumentada, en el que se veía al copiloto interactuando con un personaje animado. El video se tomó en pleno vuelo. La reacción de la compañía no se hizo esperar, desprogramó a los dos pilotos y abrió una investigación para aclarar si se puso en riesgo la seguridad del vuelo.

Otros casos hacen referencia a tripulantes de vuelo que utilizan las redes para promocionarse sexualmente, como el caso del sobrecargo de British Airways que ofrecía servicios sexuales en los destinos a donde volaba. O el caso de la azafata que se desviste en un vídeo de marcado contenido sexual, también de BA.

En Argentina dos pilotos fueron despedidos por dejar que una flamante presentadora de televisión empujara los gases del avión durante el despegue (ver noticia). En Air France un video de una azafata enseñando los pechos en la cabina de vuelo costó el empleo al comandante… y un divorcio.

¿Cómo evitar problemas en la red?

La mejor manera de no meter la pata es no publicar nada. Pero, claro, esta solución toca poco con la realidad.

La gente necesita comunicar historias. A los tripulantes de vuelo nos encanta mostrarnos paseando por las principales capitales del mundo. Los pilotos retratan amaneceres desde el cockpit, mientras azafatas y toda la tripulación posa en divertidas fotos que son publicadas en Facebook.

Para evitar riesgos lo mejor es publicar mensajes positivos.

Cuidado, una fotografía divertida puede no ser un mensaje positivo para la compañía. Antes de compartir la fotografía, asegúrate de que la foto no muestra ningún aspecto que pueda comprometer la seguridad del vuelo, ni que pueda dañar la imagen de la compañía aérea. Haz lo mismo con los videos.

Los usuarios que comparten mensajes en positivo suelen tener más seguidores y tienen una capacidad de liderazgo mucho mayor. Se convierten en verdaderos líderes de opinión y tienen capacidad de crear corrientes de opinión favorables.

Los usuarios que publican mensajes de denuncia (siempre necesarios, ¡no cabe duda!) deben de saber los riesgos a los que se exponen. El principal riesgo es que se publique una información no contrastada, y que resulte falsa.

Cómo denunciar algo que no va bien

Un tweet denunciando un aspecto menor sobre el funcionamiento interno de la compañía puede comportar una sanción. El motivo es simple: ese no es el canal para denunciar los problemas internos. Si algo no va bien, el tripulante debe dirigir la denuncia a través del canal habilitado por la aerolínea, pero no debe exponerlo públicamente.

Cuando estés con el uniforme puesto cuenta hasta diez antes de dar al botón de enviar. ¿El tweet te puede comprometer? ¿El post de Facebook puede tener consecuencias negativas? ¿El texto o la imagen que acompaña puede ser “la bomba”…? Espera, no lo envíes todavía. Medítalo. Si lo tienes claro envíalo después del próximo salto.

Sobre todo debes de tener en cuenta que el mayor riesgo reside en ti mismo. Un post poco meditado, una foto en instagram, un vídeo en un tweet que te parece gracioso, pero que no has valorado en su justa medida, se puede convertir en un serio problema.

Toma nota de las CINCO CLAVES para usar las redes sociales:

1si llevas el uniforme puesto, revisa antes de compartir un mensaje en internet (no lo compartas hasta la próxima escala)

2comprueba imágenes y videos antes de enviar ¿compromete la seguridad?

3no cuestiones el prestigio de tu compañía aérea

4no mezcles trabajo y preferencias sexuales. Ya conoces el dicho: donde tengas la olla no metas un tweet

5los mensajes positivos generan más seguidores y mejoran tu prestigio social

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