Un satélite de EEUU detectó un punto de calor sobre el Sinaí en el momento del accidente del avión ruso
WASHINGTON (EXTRACREW.COM/Agencias)- Nuevos indicios apuntan a la posibilidad de una explosión a bordo del A321 de Metrojet, siniestrado en el espacio aéreo de Egipto.
En declaraciones a la cadena NBC un funcionario estadounidense que sigue de cerca la investigación del accidente ha señalado que un satélite infrarrojo detectó un destello de calor a la misma hora en la que el Airbus A-321 se estrelló sobre Al Hasana, a unos 70 kilómetros al sur de Al Arish, la capital del norte del Sinaí.
La inteligencia estadounidense considera que podría ser una especie de explosión interna a partir de un depósito de combustible o una bomba. “La hipótesis de que el avión fue derribado por un misil no está encima de la mesa”, apuntó el citado funcionario.
El aparato se rompió en dos pedazos en pleno vuelo, según las primeras conclusiones de los investigadores rusos que junto a egipcios y expertos de Airbus e Irlanda, donde fue registrada la nave, forman parte del comité encargado de esclarecer el suceso.
El supuesto de la explosión ha sido respaldado por recientes declaraciones anónimas de un funcionario médico egipcio recogidas por la agencia de noticias estatal rusa RIA Novosti. El estado de algunos de los cuerpos recuperados del lugar del accidente podría sugerir que se registró una explosión a bordo. “El gran número de restos humanos que se han hallado separados entre si podría indicar que una fuerte explosión se produjo a bordo antes de que el avión golpeara el suelo”, ha añadido la citada fuente.
Según el examen preliminar de las grabaciones de audio, después de una conversación rutinaria entre los miembros de la tripulación se han hallado unos sonidos inusuales que coinciden con el momento en el que el avión desaparecer del radar. La agencia apunta a que el audio sugiere que hubo “una situación de emergencia súbita a bordo que pilló por sorpresa a la tripulación, por lo que los pilotos no tuvieron tiempo de enviar una señal de socorro”.
“La tripulación perdió totalmente el control y por eso no hubo un intento de ponerse en contacto e informar sobre la situación”, detalló ayer un alto ejecutivo de Kogalymavia, Alexander Smirnov.
El equipo de rescate ha concluido sus tareas y ha recuperado 196 cadáveres, de los cuales por el momento se han identificado nueve.