Fomento presenta un plan estratégico que prevé multiplicar por diez la presencia de estas aeronaves
El Plan Estratégico para el Desarrollo de Drones 2018-2021 que ha presentado este lunes el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, prevé que se pase de los 4.200 vehículos aéreos no tripulados que existen en la actualidad en España a 51.400 en 2035 y 53.500 drones en 2050.
Según las cifras que baraja el Ministerio, este crecimiento generará a mitad de siglo 11.000 puestos de trabajo y un impacto económico de 1.220 millones de euros en 2035 y de 1.520 millones para 2050.
A corto plazo, el plan regulará los usos de los drones para la agricultura, la filmación topográfica, el medio ambiente, la obra civil y la minería. Más tarde, se ampliará su espectro a las telecomunicaciones, el control de fronteras, las emergencias o a las ciudades inteligentes.
De la Serna prevé que en 2030 la integración de los drones en el espacio aéreo será completa, lo que facilitará la actividad de carga de largo alcance, el transporte de viajeros, la aparición de aerotaxis y la pequeña paquetería.
La nueva norma establece los requisitos para que los operadores de drones puedan desarrollar de forma segura actividades en entornos en los que hasta ahora no era posible hacerlo, como el sobrevuelo en las inmediaciones de edificios, reuniones de personas al aire libre y vuelos nocturnos.
También se permiten operaciones en espacio aéreo controlado, aunque en este caso, se precisan requisitos de formación del personal y de los equipos, así como un estudio aeronáutico de seguridad coordinado con el proveedor de servicios de tránsito aéreo y la previa autorización de AESA.
Según los últimos datos de AESA, en España hay 3.041 operadores de RPAS de menos de 25 kilogramos, 4.375 aeronaves registradas y 3.754 pilotos. El sector de los drones está muy atomizado, con más de 50 empresas, de las que tres de cada cuatro cuentan con menos de 10 empleados.