La industria de la aviación privada y aviones ejecutivos está recuperándose a gran velocidad. En los EEUU se considera que se está llegando al final de la crisis y que la recuperación será rápida en este sector.
La revista Business Insider publica un esperanzador artículo sobre jets privados y la aviación corporativa.
El verano ha resultado más entretenido de lo previsto para este sector. Según un estudio de McKinsey & Company el sector ha atraído a clientes de alto nivel, provenientes de la “primera clase” de la aviación comercial.
A pesar de la incerteza por el futuro de los viajes, algunas firmas de aviación corporativa están preparándose para una recuperación inminente.
LA AVIACIÓN CORPORATIVA ESTÁ EN AUGE
El momento más profundo de la crisis se vivió en abril. Por otra parte el verano se ha mostrado mucho menos complicado de lo esperado. Algunas compañías privadas de aviación han reportado una actividad casi normal.
El miedo a volar en una aerolínea comercial y una mayor exigencia en relación a la salud y la seguridad ha hecho que los clientes con más recursos se rasquen los bolsillos para viajar.
La exclusividad de la cabina de primera clase no satisface a viajeros de alto nivel económico, que buscan tranquilidad. No quieren sentirse agobiados por el riesgo de contraer el virus en un avión con cientos de pasajeros.
La gente adinerada tiene ahora una justificación para volar en jet privado: la precaución sanitaria y la seguridad. No quieren tener remordimientos.
Las compañías norteamericanas de jets, han declarado que el tráfico de este verano ha sido tan solo un 10% por debajo de lo normal. Destacan que han habido muchos nuevos clientes. Alguna compañía ha volado más horas que el pasado año, como XOjet.
Los precios ajustados hacen posible contratar un asiento en jet privado desde Palma de Mallorca a Londres por sólo 1.200 euros. Los vuelos dentro de los EEUU son incluso más baratos.
El sistema dinámico de precios en XOjet todavía debe adaptarse a la nueva normalidad del COVID-19 para dejar margen de beneficio. A pesar de eso, XOjet Aviation está planeando un crecimiento de flota de hasta un 50% en los próximos dos años.
La industria de la aviación aprovecha los momentos de profunda crisis para adquirir nuevos aviones en condiciones mucho más favorables. Aquellas compañías con más aviones, pueden ofrecer precios más competitivos y ser más flexibles a las demandas de sus clientes.
Las compañías de vuelos corporativos como Jet Edge y XOjet están comprando aviones. Las principales compras van a Cessna Citation X, Bombardier Challenger 300/350 y Gulfsream G200/280.
Las flotas de estas compañías están entorno a 30/40 aviones, y pretenden expandirse hasta un 50% más. Jet Linx ha comprado Meridian (https://meridian.aero) para ampliar la flota y ganar protagonismo en el mercado de la aviación ejecutiva.
CONTRATACIÓN DE PILOTOS
La aviación privada ha sufrido históricamente la falta de pilotos. Los profesionales de la aviación han preferido los salarios y las condiciones laborales de las aerolíneas comerciales. Por razones de estabilidad laboral y la calidad de vida, principalmente por la programación de vuelos.
La calidad de vida de los pilotos de aviación corporativa no es mala. El tipo de vuelo es diferente, se vuela a destinos poco habituales y las estancias son más largas que en vuelos comerciales. La programación depende de las necesidades del cliente.
La trayectoria típica de un piloto ha sido la de acumular horas en corporativo para alcanzar la experiencia necesaria y pasar a aerolíneas comerciales. Otros pilotos, los más experimentados, decidían volar en corporativo después de décadas en aerolíneas.
Antes de la pandemia era difícil encontrar un piloto con experiencia de vuelo que quisiera volar un G200. Ahora la demanda de empleo de pilotos es alta. El momento para contratar es único, y las compañías lo están aprovechando.
La oportunidad de encontrar talento y la disponibilidad de aviones privados, así como el coste reducido en este momento, es una oportunidad que muchas compañías privadas de vuelos no quieren desaprovechar.