Nuevos datos sobre la alarma vivida ayer en Barajas.

Nuevos datos sobre la alarma vivida ayer en Barajas.

La investigación apunta a que la nota fue dejada por alguien de un vuelo anterior

MADRID (EXTRACREW.COM/Agencias)- La investigación de la Guardia Civil en torno al falso aviso de bomba en un avión de la compañía Saudi Arabian Airlines ha dado un giro inesperado. Las pesquisas apuntan ahora a que la nota que obligó a evacuar el aparato en el aeropuerto de Barajas fue dejada allí por alguien que viajó en el vuelo anterior y que pasó desapercibida por los servicios de limpieza.

Según informan a Europa Press fuentes cercanas a la investigación, la nota no estaba en una sala de oración como se informó inicialmente, sino en un espacio reservado al catering al que sólo acceden las azafatas.

Una de las azafatas fue la que encontró el papel de pequeñas dimensiones que, además, hacía referencia a uno de los asientos del avión. Tampoco estaba clavada, sino al lado de un cuchillo del mismo catering del avión.

Los expertos en la desactivación de explosivos de la Guardia Civil procedieron a revisar el avión sin hallar ningún tipo de artefacto por lo que se determinó que la alarma era falsa. Este extremo ha sido confirmado también por un portavoz de la aerolínea en declaraciones a Reuters.

Entre los 97 pasajeros del vuelo había mayoría saudí, aunque también figuraban pasajeros de distintas nacionalidades, incluidos españoles. A estos hay que sumar los 15 miembros de la tripulación, que fueron evacuados y trasladados a una sala de Business Class en la Terminal 4 de Barajas donde se procedió a su identificación. No se ha declarado sospechoso ninguno de ellos.

En estos momentos las sospechas recaen en algún pasajero o miembro del pasaje del vuelo anterior, que había hecho el recorrido desde Riad hasta Madrid. El autor de la nota podría haber tomado otro vuelo o haberse quedado en Madrid. Las autoridades españolas están en contacto con las autoridades de Arabia Saudí, que ya cuentan con el listado de los pasajeros y la tripulación de ese vuelo anterior.

En cualquier caso, los expertos de la Guardia Civil coinciden en pensar que no se trata de una amenaza real de bomba o que haya sido realizada por un posible radical.

Comunicar una falsa amenaza de bomba como la que este jueves ha obligado a evacuar un avión en el aeropuerto de Madrid-Barajas puede acarrear una condena de cárcel, según el artículo 561 del Código Penal.