PARIS (LEPARISIEN.FR)- Según publica Le Parisien, Andreas Lubitz, el piloto de Germanwings que estrelló un avión con 149 personas a bordo el pasado 24 de marzo de 2015 en Los Alpes, se han dado a conocer una serie de mensajes enviados a sus médicos las semanas que precedieron a la tragedia que desvelan una personalidad obsesiva.
Durante tres meses antes del suicidio, Lubitz sufría estrés e insomnio por miedo a quedarse ciego, tras habérsele diagnosticado una enfermedad degenerativa en la vista que podía causar ceguera. “Paso noches en las que no duermo en absoluto”, escribió el piloto en un correo electrónico el 10 de marzo.
Asimismo, de la lectura de los distintos e mails y del contenido de su ordenador personal se desprende que visitó no menos de treinta especialistas diferentes entre enero y marzo.
El análisis de material informático de Andreas Lubitz desvela asimismo que el piloto de Germanwings quería acabar con su vida. En el historial de su Ipad se han encontrado búsquedas sobre “cantidad de somníferos que pueden provocar la muerte”, “muerte más rápida”, “cianuro” o “Valium”.
A principios de marzo nuevos análisis decartaron una enfermedad en la vista, confirmando que se trataba de un problema psicológico del piloto. Pese a ello, Lubitz persistió en su idea “Si no tuviera este problema en los ojos, todo estaría bien. Necesitaría ayuda de emergencia para dormir”, insistía en su correo.
Finalmente, una psiquiatra sospechó del diagnóstico de psicosis por lo que le invitó a abandonar el trabajo hasta el 29 de marzo y le recetó potentes somníferos.
Lubitz ocultó toda esta información a Germanwings. El 20 de marzo tuvo lugar su última revisión médica, en la que el copiloto aseguró dormir un poco mejor y estar superando problemas de relación.
Ese mismo día, 20 de marzo, el análisis del historial de su IPad revela una búsqueda en Google para hallar información sobre el modo de bloquear la puerta, navega por fórums especializados, visiona un reportaje televisivo y diversos artículos que tratan sobre la seguridad del sistema electrónico de los aviones. También bucea por “directivas anticipadas” y documentos que tratan sobre mantener a alguien con vida, o no, después de un accidente. Según los peritos forenses ese día Lubitz había ya asumido su decisión y lo tenía todo preparado.
Si. Un mamón como dices, pero lo que no se explica es:
1º Como los médicos que lo atendieron, conociendo sus manías y cual era su trabajo, no se pusierno en contacto con la compañía, ni con la AME. Si yo fuera ellos, no se si conseguiría conciliar el sueño desde lo que pasó.
y 2º Si tan clara está la cosa, como es que no se ha emitido un informe definitivo. El último (que yo sepa) data de mayo de 2015, y es provisional.
Aquí os dejo el link:
https://www.bea.aero/uploads/tx_elyextendttnews/d-px150324.es.pdf