Variómetro 04/01

PILOTOS DE RYANAIR

Los pilotos de Ryanair por fin se han organizado y han dado el primer paso fundamental para defender sus derechos laborales: Han votado, y han expresado democráticamente su deseo de tener representantes sindicales.

Contraponer una representación sindical a los deseos unilaterales de la patronal no es hoy en día -como interesadamente pretenden hacer creer algunos- una estrategia para “lograr privilegios”, sino un derecho conquistado durante décadas de lucha de las generaciones que nos precedieron. Los sistemas actuales de representación de los pilotos en Ryanair, organizados por la dirección de la compañía, pertenecen a un pasado que todos creíamos olvidado y que es preciso abandonar. El paso dado por los pilotos de Ryanair hace pocas semanas pone la primera piedra para ello.

Las continuas denuncias acerca del trato laboral que la compañía irlandesa ofrece a sus trabajadores seguramente no son fruto de la casualidad –cuando el río suena…- y contrastan duramente con su éxito empresarial. Un éxito que no puede sustentarse en modo alguno en la minusvaloración de los derechos de quienes con su trabajo lo hacen posible.

HISPANIA AIRWAYS

El primero de ellos, la brevedad. Hispania Airways ha durado en el aire dos semanas. Uno se pregunta ¿Cómo es posible que una empresa finalice su actividad a los quince días de haberla iniciado?

Una primera posible respuesta hablaría de la ineptitud de sus promotores, pero plantearía de inmediato otra incógnita ¿Cómo se puede formular una inversión sin un previo estudio de mercado? Parece imposible en los tiempos que corren, en los que una oferta de trabajo para barrer calles incluye la exigencia de idiomas, un master y un MBA, que alguien pueda acceder a la gestión ejecutiva de una empresa sin los mínimos conocimientos exigibles.

Otra posible explicación nos traslada a la economía de picaresca y pelotazo, un terreno donde con tanta comodidad se mueven determinados sectores y que parecía olvidado, pero no. ¿Quién no recuerda la efímera historia de la subvencionada Flysur, a lomos de los aviones -y de la AOC- de la asimismo finiquitada Top Fly? ¿Será éste el caso de Hispania Airways o, por el contrario como aseguran sus promotores, resurgirá de sus cenizas como el ave fénix? Tiempo al tiempo.

En cualquier caso siempre quedará la solución de achacar el fracaso a un error de cálculo, o la crisis, enorme sayo bajo el que cabe refugiar casi cualquier inconfesable desatino porque, como dice Leopoldo Abadía, “La crisis económica es una consecuencia de la crisis de decencia.“