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ALEXANDER AKOPOV
Por convertirse en el “Sully” de la compañía Atlas Global
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Aterrizar en medio de una tormenta de granizo no es tarea fácil. Si además el pedrisco alcanza el tamaño de pelotas de golf, y destroza a su paso todo lo que encuentra, el aterrizaje puede adquirir visos de dramático y casi milagroso.
Eso es lo que hizo el comandante Akopov y su tripulación el pasado fin de semana, cuando consiguió “bajar” de una pieza el A320 de la turca Atlas Global y a las 127 personas que se encontraban a bordo, a pesar de llevar el morro del avión absolutamente destrozado y los parabrisas hechos añicos a causa del contundente bombardeo a que fueron sometidos.
“Fue mi aterrizaje más difícil en 30 años como piloto”, dijo tras el suceso Alexander Akopov. La hazaña de este ucraniano a buen seguro que no traspasará a la gran pantalla como la de su colega americano Chesley “Sully” Sullenberger, pero no será por falta de méritos.
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