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PATRIOTS

Por ser los primeros con avión propio


“Yo para ser feliz quiero un avión” podría rezar la popular canción eso sí, con ligeros retoques de letra. Pues eso mismo parecen haber pensado los Patriots de Nueva Inglaterra (USA), actuales campeones del Super Bowl, que se han convertido en el primer equipo en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) que ha comprado no uno sino dos aviones B767 para sus desplazamientos.
Nos parece extremadamente interesante que el razonamiento de este equipo, ante el encarecimiento de los vuelos chárter, haya pensado que la mejor solución era disponer de un avión propio con capacidad y alcance para satisfacer sus necesidades.
Como bien saben las corporaciones internacionales -algunas con un presupuesto menor al que manejan los grandes clubs deportivos- a la larga, disponer de avión propio ahorra dinero. Una buena idea que tal vez no debiera caer en saco roto para los equipos que en Europa juegan la “Champions”.

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GAMBERROS DEL LÁSER

Por poner en riesgo la vida de los demás


No es nuevo. Es tediosamente viejo, no referimos al asunto de los desaprensivos que “armados” con un emisor de rayos láser se dedican a incordiar y cegar a los pilotos en la fase más crítica del vuelo; la aproximación previa al aterrizaje.
Resulta obvio decir que el uso de tales artilugios para tan inconfesable broma puede acarrear una catástrofe de consecuencias difíciles de calcular. Obvio para todos, menos para estos desaprensivos que se creen bromistas pero que en realidad son simples gamberros. Probablemente intentar reflexionar con estos “individuos” sobre las consecuencias de sus acciones sea tan infructuoso como dar un ramo de margaritas a una piara de cerdos, pero algo hay que hacer antes de que sea demasiado tarde.
¿Para cuándo una legislación eficaz para con estos casos? ¿Para cuándo un castigo ejemplar para los que incurren en este delito? ¿Habrá que esperar a que se produzca una catástrofe para que la Administración tome en serio cartas en el asunto?