CÓMO ESTÁ EL ESPACIO AÉREO?

Lo mejor y lo peor de la aviación civil

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EL DISCOVERY

Por haber volado más alto que ningún avión


El Discovery, el último “shuttle” que viajó al espacio, ha efectuado esta semana su último vuelo. En esta ocasión no ha sido por sus propios medios sino a lomos de un B747, el Shuttle Carrier Aircraft (SCA), de la NASA que lo ha llevado a su destino final en el Smithsonian Museum de Washington.

Atrás quedan 30 años de misiones, con sus éxitos y con sus fracasos. Los nombres de los Columbia, Challenger, Discovery, Atlantis y Endeavour, junto a los de las tripulaciones que los volaron, forman parte ya de la historia de la aeronáutica y de la conquista espacial.

Cuentan que antes de poner rumbo a su destino final el transporte del Discovery realizó a modo de despedida un lento 360 sobre las instalaciones del Centro Espacial Kennedy, en Florida, escenario de tantos despegues entre el fragor de motores rugientes, cortinas de humo y llamas, y multitudes expectantes. Fue como si quisiera grabar en el recuerdo el lugar desde el que en 39 ocasiones había roto el silencio para partir hacia las profundidades del espacio. Luego se alejó y todo volvió a quedar en silencio como antes, sólo que esta vez su destino no eran las estrellas, sino algo mucho más cercano.

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LOS A380 DE BRITISH

Porque los milagros no existen

Las factorías de Airbus han iniciado el ensamblaje del primero de los 12 Airbus A380 que encargó en 2007 British Airways al fabricante europeo para renovar y ampliar su flota de largo radio. No es que esta sea una mala noticia, y no por ello ocupa el segmento descendente de nuestro variómetro. La fabricación de una docena de nuevas unidades de un avión que directa o indirectamente proporciona trabajo a varios miles de personas siempre es bien recibida. Otra cosa son las circunstancias en que se produce este anuncio.

No resulta excesivamente extraño que entre la noticia de la adquisición y el inicio del ensamblaje de la primera unidad hayan transcurrido ni más ni menos que más de cuatro años, teniendo en cuenta la cartera de pedidos, que para el 380 es a día de hoy de 253 unidades, de las cuales se han entregado ya 71. Lo que si contrasta bastante es el notable cambio en la situación económica del socio británico en IAG, que ha pasado de tener serios apuros de caja, a anunciar un programa de mejoras y renovación de flota cifrado en 5.000 millones de libras estelinas en cinco años. Y lo que ya definitivamente sonroja –o debiera sonrojar a más de uno- es que paralelamente la otra media naranja en IAG, Iberia, se está vaciando de contenido al mismo ritmo. ¿Casualidad, o expolio?

En 2013 British estrenará su primer A380 en rutas de largo radio ¿Podrá hacer lo mismo Iberia con los tan traídos y llevados A330?