IBERIA

Por su puntualidad

“Con Iberia, ya hubiera llegado” rezaba un slogan de Iberia de hace algunos -bastantes- años. Como siguiendo esa antigua frase publicitaria, Iberia ha vuelto a ponerse en cabeza de la puntualidad aérea a nivel mundial, de nuevo este mes de octubre. Y ya van tres este año.

Poco a poco parece que la zona de turbulencia severa que la compañía ha atravesado en los últimos tiempos queda atrás y que el nivel de vuelo alcanzado, sin ser el “final deseado”, va proporcionando la travesía placida que todos deseamos. La que antaño fuera aerolínea de bandera española está además recobrando cuota de mercado con la recuperación de rutas -que tal vez jamás debieran haber sido abandonadas- como mejor modo de volver al esplendor de hace unos pocos años. En esta recuperación del nivel de vuelo juegan un papel no poco importante la actitud ilusionante que Iberia sea capaz de generar entre sus profesionales, como responsables en un alto porcentaje de estas primeras “victorias”.

Otro slogan muy popular en la década de los 60 y 70 rezaba “En Iberia, sólo el avión recibe más atenciones que Vd.” un planteamiento que Iberia hará bien en hacer extensivo a cuantos con su trabajo han conseguido poner a la compañía a la cabeza, en octubre, en puntualidad.

AIR EUROPA

Por racanear los salarios a los TCP

Esta pasada semana Air Europa nos sorprendió con su decisión de bajar los salarios de los TCP que “hacen cola” para entrar –en algunos casos por enésima vez- como eventuales en diciembre en la compañía. Y todavía sorprendió más la excusa tras la que se escuda la compañía para ello: que “una parte de la representación social ha dejado decaer la negociación del III Convenio Colectivo de TCPs y que, en vista de ello, se encuentra en la obligación de adoptar medidas para adaptar sus costes con vistas al futuro”.

No se puede hallar respuesta más cínica que cargar la culpa de todos los males al propio colectivo interesado. A la propia precariedad que el empleo temporal conlleva, Air Europa quiere ahora unir unos salarios del todo impropios en unos profesionales que más allá de sus labores de atención al pasaje son los garantes de sus vidas en caso de catástrofe o incidente grave.

Air Europa hace escasos días sacaba pecho ante los medios de comunicación divulgando una facturación en el ejercicio correspondiente a este año de 1.800 millones de euros -con un crecimiento del 15 % con respecto a 2013- ahora, con su actitud frente a la llegada de los nuevos TCP, deja muy claro que la grandeza de una compañía no sólo debe medirse por sus resultados contables.